Pato relleno de marisco

Esta receta, aunque parezca cara no lo es, un pato de Berbería congelado de quilo y medio  se puede conseguir a muy buen precio en los supermercados de una cadena alemana.

Una mezcla de sabores maravillosa.

   Esta receta es para día de fiesta. La preparamos un domingo por la mañana mientras cocemos las gambas y los langostinos y limpiamos el pescado. Va como segundo plato porque antes están los langostinos, el pescado frito, platos de jamón..., en fin, esas cositas.

INGREDIENTES(4)

Medio pato deshuesado en una sola pieza con piel.

Para el relleno

Tiras de jamón serrano

Unas gambas blancas

Unos langostinos

Chopitos

Piñones

Almendra molida

Un huevo

Tres o cuatro ajos

Perejil

Para la salsa

Pimienta molida

Clavo

Una cebolla mediana

Sal

Vino blanco



 PREPARACIÓN

    Preparamos el pato con la piel para abajo, salpimentamos y vamos colocando el relleno, los ajos los cortamos en tiras largas. Una vez bien rellenito incluidos muslo y ala, batimos un huevo y le añadimos almendra molida hasta que espese un poco, que resbale torpemente de la cuchara. Colocamos la masa extendida sobre el relleno y envolvemos poniendo siempre la parte fina para el centro, nos quedará un cilindro al que volvemos hacia adentro las puntas como un muñón y que ataremos bien fuerte con algodón.

   Colocamos la carne en una olla de hierro fundido precalentada con la parte de la grasa hacia abajo y subimos el fuego, la grasa que va soltando es la que hará el guiso. Doramos por todos lados rápidamente y añadimos un buen chorreón de vino, tapamos y dejamos que reduzca. A continuación añadimos un poco de caldo de gambas y dejamos hervir

   La salsa, que habremos preparado antes, es muy fácil: ponemos en el vaso de la Túrmix la cebolla pelada, pimienta molida, perejil, dos ajos pelados, unos piñones, un poco de harina de almendras y caldo de haber cocido las gambas y molemos muy bien, añadimos a la olla hasta que cubra la carne completando con caldo si hace falta.

   Tapamos y ponemos a fuego medio unos tres cuartos de hora moviendo de vez en cuando con espátula de madera rascando el fondo para que no se pegue. pasado ese tiempo la salsa habrá reducido lo suficiente y la carne estará blandita.

  Que aproveche.