Hoy hemos tenido comida familiar en el campo y nos hemos preparado un par de chivos (chotos, cabritos) al ajillo, pero, para abrir boca, antes nos hemos obsequiado con todas las asaduras en un sofrito a la sartén.
INGREDIENTES
Hígado, corazón, pulmones, mollejas, riñones y sesos de chivo.
Cebollas
Perejil
Orégano
Comino
Pimienta negra en grano
Sal
Aceite de oliva
Vino fino, un vasito.
PREPARACIÓN
Limpiamos bien todas las vísceras y las lavamos lo suficiente, a los sesos le quitamos la telilla que los cubre y los reservamos. Cortamos un par de cebollas y las picamos hasta que queden reducidas a trocitos muy pequeños y las ponemos con las vísceras en la sartén, aceite, sal y fuego moderado un rato. Cuando están a media cocción, empiezan a ponerse marrones, le añadimos las especias y los sesos y seguimos moviendo. Con el movimiento los sesos se irán deshaciendo y habrá que mover bastante para que no se pegue, entonces añadimos el vino, dejamos un ratito más y servimos. Sale una salsita espesa buenísima.
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